Tzol (palabra de origen quekchi que significa ordenamiento espacial) es una firma inspirada en el entorno natural guatemalteco, dedicada a la Arquitectura. Nace de la inspiración y dedicación de Jaime Malouf y Jorge Recinos. Ambos se conocieron estudiando en la Universidad y desde que realizaron un proyecto juntos, se consideran un complemento perfecto a pesar de tener personalidades distintas.
Su primer proyecto representó uno de sus mayores retos. Debían diseñar un local en Cayalá, sin experiencia en aspectos básicos y presupuestos, lo tomaron como un punto de partida para cumplir con sus sueños, con el apoyo de un profesional, lograron iniciar una carrera exitosa. Con varios proyectos realizados, el favorito es Casa Terra, ubicada en San Lucas, mezcla lo futurista con lo primitivo y lleva el sello particular de la firma, ser disruptivo.
La oficina de Tzol es particular, ya que la ambientación fue creada para transmitir la esencia de la marca, “ser lo que se hace”. Jaime y Jorge consideran que ese espacio es un portal hacia la creatividad para que los clientes conozcan lo capaces que son de lograr experiencias únicas. Cuentan con un equipo de trabajo muy especial, con profesionales que se complementan muy bien.
Lo primero es entender al cliente, lo que busca del proyecto y sus necesidades. Para luego iniciar con un Brainstorming y lograr trasladarlo a la realidad de una forma inspiradora.
Durante el inicio de la pandemia surgieron cambios fuertes. De tener 18 proyectos, pasaron a solo 6. Les tocó reiniciar, pero lograron identificar que era indispensable dedicar tiempo y energía a los proyectos, así como supervisar las obras. El equipo creció en ese aspecto.
Consideran que uno de los mayores retos de la Arquitectura en Guatemala es lograr que las personas aprecien el diseño y lo vean más allá de la funcionalidad y rentabilidad. Un buen arquitecto es aquel que expresa el arte y logra educar a las personas a que valoren el concepto.
Ambos consideran que las oportunidades para el desarrollo de la Arquitectura en el país son bastas. La riqueza que ofrece con recursos naturales únicos, volcanes, vistas, entre otras, es una oportunidad de desarrollar conceptos valiosos.
A pesar de que consideran que es mejor vivir el momento. Visualizan a Tzol en 10 años como un equipo con más personas, con una oficina más grande y con mayor confianza para realizar grandes proyectos que trascienden dentro y fuera de Guatemala.